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A 15 años de vigencia del CAFTA-DR, Nicaragua ha ganado en exportaciones, en inversiones, en empleos y en manufactura con más complejidad

CAFTA-DR

• Exportaciones de bienes y mercancías hacia Estados Unidos han aumentado 137.6% desde 2006 hasta 2019
• Y las exportaciones del sector textil y confección incrementaron en 103.2% en el mismo periodo
• La IED procedente de Estados Unidos alcanzó alrededor de US$3,053 millones entre 2007-2019, de acuerdo con cifras oficiales del Departamento de Comercio de ese país

4 de abril de 2006. El Presidente de la República, Enrique Bolaños Geyer, dirige un mensaje a la nación tres días después de entrar en vigencia el Tratado de Libre Comercio entre Centroamérica y Estados Unidos (CAFTA-DR), al que se sumaría después Costa Rica y República Dominicana.

Hoy vivimos momentos históricos y en el futuro se recordará un “antes” y un “después” del CAFTA. El gran ganador será nuestro pueblo al dar este gran paso para derrotar la pobreza. Vendrán muchas inversiones que crearán numerosos nuevos empleos, especialmente para los pequeños y medianos productores que ayudarán a muchos que todavía están desempleados a subirse a los peldaños de la escalera del progreso”,

apuntó entonces el mandatario nicaragüense, quien falleció el pasado 14 de junio del presente año y promovió con ahínco la promulgación y aprobación del CAFTA-DR.

A 15 años de la entrada en vigencia en Nicaragua, los hechos le dan la razón. De acuerdo a cifras del Buró de Análisis Económico del Departamento de Comercio de los Estados Unidos de América (BEA por sus siglas en inglés), la inversión extranjera directa en Nicaragua, procedente de empresas de origen estadounidense, suma alrededor de US$3,053 millones entre 2007-2019, correspondiendo la mayor cifra al año 2011 (US$357 millones). Las inversiones corresponden a todos los sectores, desde el minero hasta el financiero.
Datos de entidades gubernamentales —entre ellas el Banco Central de Nicaragua— indican que la Inversión Extranjera Directa (IED) procedente de Estados Unidos sumó alrededor de US$1,611 millones entre los años 2006-2014. La cifra mayor se dio en 2013, cuando registró un total de US$410.2 millones, correspondiendo a los sectores industria y minas.
Nicaragua no sólo ha ganado con la inversión extranjera directa (IED). El impacto positivo del CAFTA-DR también queda en evidencia en el incremento de las exportaciones de bienes y mercancías desde Nicaragua, en el crecimiento de las empresas bajo el régimen de zona franca, en mejores condiciones laborales para los trabajadores de ese sector y en la evolución de los sectores textil y confección y de arneses automotrices.
En 2006, año en que entró en vigencia en Nicaragua el CAFTA-DR, el país exportó hacia Estados Unidos, su principal mercado externo, un total de US$1,868 millones en bienes y servicios, de acuerdo a cifras proporcionadas por el Buró de Análisis Económico del Departamento de Comercio de los Estados Unidos (BEA por sus siglas en inglés).
De ese monto, las exportaciones en bienes y mercancías correspondieron a US$1,542 millones y US$327 millones en servicios. En el primer renglón se incluyen categorías como bienes en general; alimentos, semillas y bebidas; bienes de capital con excepción de automóviles; suministros y materiales industriales; bienes de consumo excepto alimentos y automóviles; otra mercancía en general y; oro no en monedas.
Para 2019, las exportaciones en bienes y mercancías alcanzaron el monto de US$4,439 millones, cifra que representa un incremento de 137.6%. En bienes y mercancías suman US$3,876 millones y en servicios US$563 millones. La categoría que alcanza mayor preponderancia es bienes de consumo que no incluyen automóviles con US$2,056 millones.

Arneses automotrices

4 de abril de 2006, Mensaje a la Nación. “No es que sólo vendrán zonas francas para pegar botones y camisas y pantalones, sino que vendrán zonas francas para ensamblar refrigeradoras, lavadoras de ropa, componentes de carros, ensamblaje de computadoras… más tecnología… y más adelante hasta ensamblaje de motos y estoy seguro que nuestros hijos van a ensamblar carros que ahora Estados Unidos y Europa buscan ensamblar en China”, señaló el Presidente Enrique Bolaños en ese histórico discurso, tres días después de la entrada en vigencia del CAFTA-DR.

Nicaragua incursionó en la producción y exportación de arneses automotrices en 2002, con una planta ubicada en la ciudad de León. Ese año, de acuerdo con información de la Comisión Nacional de Zonas Francas, se exportaron US$2.7 millones en dispositivos eléctricos de vehículos.
A raíz de la entrada en vigencia del CAFTA-DR, y con mayor inversión en otras plantas en Chinandega y El Viejo, la exportación aumentó a US$270.3 millones en 2007 y ha seguido creciendo con el paso de los años. En 2016, según cifras de la CNZF, alcanzaron la cifra récord de US$662.9 millones.
En 2020 sumaron US$393.6 millones, pese a las interrupciones provocadas por la pandemia sanitaria en las cadenas de suministros a nivel global y a una reducción en la demanda de vehículos en todo el mundo. Entre 2006-2020 el crecimiento de las exportaciones corresponde a 171.3%.
En términos de generación de empleos, las plantas de arneses automotrices están en el Top 5 entre los mayores empleadores en Nicaragua. Al respecto, la Memoria Anual del BCN 2018 señala lo siguiente: “Finalmente, las empresas que operan bajo el régimen de zonas francas alcanzaron un nivel de ocupación de 125.5 miles de trabajadores en diciembre 2018 (118.6 miles en el mismo periodo de 2017). Así, del total de trabajadores que laboran bajo este régimen, 60.2% se ubica en empresas dedicadas a la confección de prendas de vestir (textil-vestuario), seguido por empresas tabacaleras (12.5%), y empresas que elaboran arneses automotrices (11.5%)”.


Pero el CAFTA-DR no sólo impulsó el incremento del número de empresas que fabrican arneses eléctricos bajo el régimen de zona franca, sino también empresas del sector agroindustrial, de servicios de call center y de tercerización (outsourcing), y de puros.
De acuerdo con el Anuario de Estadísticas Macroeconómicas 2020, del Banco Central de Nicaragua (BCN), las empresas pasaron de 99 en 2006 a 189 en 2020, lo que representa un incremento del 90.9%.
Por otra parte, el número de empleados directos aumentó de 76,783 en 2006 a 113,586 en 2020, lo que significa un aumento del 47.9%. Asimismo, las exportaciones crecieron de US$938.9 millones a US$2,469.2 millones, lo que representa un crecimiento del 163%.

Sector textil ganó en valor agregado
En el caso del sector textil confección, los beneficios no sólo se tradujeron en incremento de las exportaciones, sino también en una mejoría notable de las condiciones socio laborales de miles de colaboradores de ese sector —la gran mayoría mujeres y madres cabeza de familia— y en una mayor complejidad en las líneas de producción.
A raíz de la entrada en vigencia del CAFTA-DR, en el sector textil y confección que opera en Nicaragua se impulsó el programa BetterWork, promovido por la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y por la International Finance Corporation (IFC), miembro del Grupo del Banco Mundial.
El programa desarrollado a lo largo de varios años en 24 empresas, que empleaban a 40,000 empleados, promovió estándares laborales acorde con normas internacionales y de la legislación nicaragüense en lo referido a contratos, seguridad social, salud y salarios. Entre los socios internacionales de BetterWork destacaron Target, Gap Inc., Nike, M&S y Global Brands Group, entre otras.
En el sector textil y confección, de acuerdo a cifras de The Office of Textiles and Apparel (OTEXA), las exportaciones hacia los Estados Unidos pasaron de US$879.3 millones en 2006 a US$1,787.6 millones en 2019, lo que representaría un incremento del 103.2%.
En una entrevista concedida años atrás por un especialista del sector textil y confección, éste apuntó que antes de la entrada en vigencia del CAFTA-DR, las industrias que operan en Nicaragua sólo producían pantalones básicos y camisetas, las prendas T-shirt.
Pero después del CAFTA, se empezó a generar valor agregado, a diversificar las líneas de producción un poco más tecnificadas y, finalmente, a crecer en la producción de volumen, de valor FOB y en generación de miles de nuevos empleos.

Superávit comercial
17 de diciembre de 2003. Robert B. Zoellick, Representante de Comercio de Estados Unidos (USTR), toma la palabra durante el acto solemne de firma del tratado comercial CAFTA en la sede de la OEA, en Washington D.C., acompañado de los ministros de Economía de cuatro países de Centroamérica, entre ellos Nicaragua.

Los Estados Unidos están comprometidos a abrir los mercados alrededor del mundo para que los agricultores, trabajadores, consumidores y hombres de negocios americanos, puedan vender sus bienes y servicios de clase mundial. CAFTA impulsará el comercio, promoverá inversiones, reducirá tarifas y removerá barreras al comercio y los servicios, protegerá la propiedad intelectual, fortalecerá las condiciones laborales y del medio ambiente y promoverá regulaciones transparentes”,

señaló Zoellick en esa oportunidad.

En efecto, el comercio bilateral entre ambos países se ha fortalecido, ya que así como han crecido las exportaciones de Nicaragua hacia Estados Unidos con el CAFTA-DR, también han aumentado las importaciones de bienes, mercancías y servicios, provenientes de Norteamérica.
De acuerdo a las cifras del BEA, en 2006 Nicaragua importó un total de US$1,033 millones, desglosados en US$755 millones en bienes y mercancías y US$278 millones en servicios. Años después, en 2019, las importaciones alcanzaron el monto de US$2,024 millones, correspondiendo US$1,618 millones a bienes en general y US$416 millones en servicios. Eso representa un incremento del 95.9% entre 2006-2019, cifra menor en 41.7% a las exportaciones desde Nicaragua.
Si quisiéramos compararla con 2020, las importaciones sumaron US$1,674 millones, según las cifras oficiales del BEA. Eso representaría un incremento de apenas 62.0% con respecto a 2006, lo que evidencia que desde que entró en vigencia el acuerdo comercial con Estados Unidos (CAFTA-DR), Nicaragua mantiene un superávit comercial a su favor.

21 de Julio de 2005, plenario OEA.
El Presidente de Estados Unidos, George W. Bush, se dirige a la Asamblea General de la Organización de Estados Americanos (OEA) para explicar el tratado comercial con Centroamérica (CAFTA).

CAFTA ayudará a las naciones de Centro América a impulsar prosperidad y oportunidades para sus ciudadanos. Permítanme repetirlo. CAFTA no es sólo bueno para nosotros, es también bueno para nuestros socios. Ese es un acuerdo justo. Eso es lo que queremos. Un acuerdo balanceado y justo. Queremos un acuerdo bueno para nosotros, pero también queremos un acuerdo bueno para nuestros amigos. Este es un buen acuerdo para las naciones CAFTA”,

señaló el presidente Bush.