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Mujeres al volante

Como parte de sus Políticas y estándares, cuenta con normas, procedimientos, y mecanismos que contribuyen al cumplimiento de las leyes, al respeto de los derechos humanos, y al no permitir ningún tipo de maltrato, violencia o acoso.

En total la empresa cuenta con 3,977 colaboradores, de los cuales el 13% son mujeres, distribuidos en cargos de: nivel gerencial 38%; así mismo en los puestos de profesionales se cuenta con un 31% de mujeres; y en el nivel administrativo las mujeres representan un 49% del total de los colaboradores.

La equidad de género se promueve a todos los niveles de la organización, los distintos procesos de gestión humana en Monte Rosa se realizan con base en competencias definidas para el logro de los objetivos organizacionales. Con este proceder, los criterios para seleccionar, promover y remunerar a sus colaboradores se centran en las habilidades y capacidades de estos y no en condiciones como género, raza, procedencia, filiación política ni influencias personales.

“En los últimos años hemos venido incrementando, el númerode mujeres en puestos que tradicionalmente han sido ocupados por hombres, en tareas como obreras agrícolas, brigadistas de salud, y en operación de maquinaria pesada, expresó la Ing. Dalia Jiménez, Gerente de Recursos Humanos”.

Como un ejemplo de las prácticas que Monte Rosa realiza, desde septiembre del 2005 se implementa un programa para promover la equidad de género en la empresa, “Mujeres al Volante”. Dicho programa inicio con la contratación de 6 mujeres para el puesto de conductor de vehículos livianos, ocupando cargos de conductor de ambulancia, conductor de taller de maquinaria, conductor de vehículos livianos en Recursos Humanos y otras áreas de la empresa.

Tomando en cuenta los resultados positivos que dejó esta experiencia la Gerencia del Ingenio Monte Rosa, decidió ir más allá y se propuso agregar mujeres en puestos de la operación que comúnmente seguían siendo ocupados solo por hombres, y se inició un proyecto de formación de operadores de maquinaria pesada donde se incluyó mujeres para que también fueran parte del mismo.

Actualmente el Ingenio Monte Rosa cuenta con mujeres operando cosechadoras para garantizar la caña mecanizada que el ingenio procesa diariamente y también con mujeres capacitadas operando tractores, y carretas de caña para hacer el movimiento dentro del ingenio.

El programa de entrenamiento dura aproximadamente 12 meses, en este período pasan por preparación teórica, aprenden a reconocer el equipo, luego pasan por entrenamientos prácticos con un tutor que está realizando evaluaciones sobre cada actividad que deben aprender y posteriormente hacen un período de tiempo de aprendizaje en aspectos básicos de mecánica en el taller de maquinaria para conocer el cuido y manejo del equipo que se les debe asignar.

“Para mi ha sido un sueño que el Ingenio Monte Rosa me diera la oportunidad de operar esta maquinaria pesada, eso me ayuda y me motiva para hacerlo con el mejor desempeño, comentóMaría José Guerrero, operadora de cabezal”.

Es parte de los objetivos de la empresa, mantener estos programas y garantizar que las mujeres dentro de la organización cuenten con las mismas oportunidades, y la decisión de ocupar un puesto sea evaluando aspectos de educación, experiencia y habilidades requeridas para desarrollarlo.

“En la zafra que inicie para mi fue alegría, yo me sentía orgullosa, porque le demostraba a las demás mujeres que ellas también podían algún día llegar a operar una maquina de estas, expresó Reyna Campos, operadora de tractor”.

Esta oportunidad a cambiado la vida de estas mujeres y sus núcleos familiares, empoderándolas e inspirando deseos de superación.

“Hoy puedo ayudarle a mis padres, me satisface eso, puedo contribuir incluso con mi esposo, estamos haciendo un pequeño ahorro para construir la casa, definitivamente esta oportunidad ha cambiado mi vida, dice María José”.

Por su parte Martha Meneses, operadora de cosechadora, nos comenta “me he superado económicamente, mi casa ha mejorado, ha cambiado mi vida y la vida de mis hijos”.

Las iniciativas van más allá de las capacitaciones y de brindar a las mujeres apertura y condiciones para ocupar puestos tradicionalmente de hombres, sino también en velar por la integridad y ética de cada una.

Dentro de nuestra organización existe un Código de Ética y Conducta, el que contribuye a la educación y prevención de cualquier tipo de maltrato, violencia y acoso sexual.

Nuestras Buenas Prácticas y proyectos en el tema de Género han sido reconocidas por la Unión Unión Nicaragüense para la Responsabilidad Social Empresarial (uniRSE), quienes luego de realizar un diagnóstico dentro de la empresa, nos otorgaron el reconocimiento como empresa que aplicó el Modelo de Gestión de Buenas Prácticas Empresariales con Equidad de Género de Nicaragua.